En una entrevista reciente, el médico infectólogo Hugo Pizzi abordó temas clave sobre la salud pública en la región, desde el impacto de la vacuna contra el dengue hasta la aparición de nuevas enfermedades en Brasil.
La vacuna contra el dengue: avances y desafíos
Pizzi destacó la importancia de la vacuna Qdenga, una herramienta clave para prevenir cuadros graves y hemorrágicos del dengue por un período de cinco años. Sin embargo, señaló que su implementación enfrenta barreras logísticas y económicas: "Es una vacuna cara y complicada porque requiere tres meses entre cada dosis".
El especialista describió dos realidades en el país: "Por un lado, la gente que es citada para vacunarse gratuitamente no asiste, y por otro, quienes quieren vacunarse no consiguen las dosis porque no hay. Hay una disyuntiva", afirmó.
En este contexto, se espera la llegada de una solución más accesible desde Brasil. El Instituto Butantan, en San Pablo, está próximo a lanzar una vacuna monodosis contra el dengue, que promete ser más económica y efectiva. "Es una vacuna estupenda. Ya vi los resultados con los voluntarios y han sido muy buenos. Ahí se van a acabar muchos problemas", aseguró Pizzi.
Mientras tanto, subrayó la necesidad de reforzar medidas preventivas, como la limpieza de espacios y la eliminación de criaderos de mosquitos.
Alerta por gastroenteritis en Brasil
Consultado sobre el aumento de casos de gastroenteritis en Brasil, Pizzi indicó que muchos están asociados a virus y bacterias coliformes. Recomendó extremar los cuidados al consumir alimentos y agua en el país vecino:
- No usar agua no potable para lavar alimentos.
- Cocinar las verduras con agua segura.
- Evitar el contacto con playas o zonas contaminadas.
"Si van a viajar a Brasil, protector solar y repelente, porque el mosquito transmite no solo dengue, sino también fiebre amarilla", recalcó.
El virus del Oropouche: una nueva amenaza
Pizzi alertó sobre la aparición de casos del virus del Oropouche en Brasil, una enfermedad transmitida por el jején (Culicoides paraensis) y, en algunos casos, por el mosquito Culex quinquefasciatus.
Los síntomas incluyen fiebre repentina, dolor de cabeza, rigidez articular, náuseas y vómitos, además de posibles complicaciones como meningitis aséptica. Aunque los síntomas suelen durar de cinco a siete días, la recuperación completa puede extenderse por semanas.
El médico insistió en que la prevención sigue siendo la herramienta más efectiva frente a estas enfermedades emergentes.