SAO PAULO, 21 ene (Xinhua) -- Una prueba para detectar anticuerpos de la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19) en sólo 10 minutos, y que cuesta cinco veces menos que el promedio del mercado, fue desarrollada por científicos de la Universidad de Sao Paulo (USP) y una "startup" (empresa emergente) farmacéutica brasileña, informó hoy jueves la Fundación de Amparo a la Investigación del estado de Sao Paulo (FAPESP) en un comunicado.
Según la FAPESP, que financió el desarrollo el proyecto, el dispositivo funciona en forma similar a las pruebas rápidas que se venden en las farmacias de Brasil, pero también servirá para monitorear la respuesta de la población a las vacunas contra la COVID-19.
El objetivo, por su bajo costo al emplear insumos nacionales, es popularizar el uso de los exámenes rápidos para reducir el nivel de contagios de la pandemia, al tener en cuenta que Brasil es el segundo país con más muertes por la COVID-19, detrás de Estados Unidos.
El dispositivo, realizado por el Instituto de Química de Sao Carlos de la USP y la "startup" Biolinker, analiza una gota de sangre del usuario e identifica la presencia de anticuerpos del tipo inmunoglobulina G (IgG), producidos incluso en la fase aguda de la enfermedad (en promedio 10 días después del inicio de los síntomas).
"Creemos que el 'test' también se puede utilizar para monitorear la respuesta de la población a las vacunas. Sabemos que no todo el mundo desarrolla inmunidad protectora después de ser vacunados, y también que el nivel de anticuerpos se reduce con el tiempo", afirmó el coordinador del estudio, profesor Frank Crespilho.
Agregó que la tecnología empleada en esta prueba rápida tiene la capacidad de captar las variantes virales del nuevo coronavirus.
Una vez obtenido el registro ante el ente regulador Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), la prueba tuvo un valor de 30 reales (5,6 dólares), contra los 140 reales (26,4 dólares) de productos similares existentes en las farmacias y los laboratorios privados, razón por la cual se le llamó "Prueba Popular de COVID-19".
"Todos los insumos son producidos en Brasil, por eso es que el costo es bajo, y logramos desarrollarlo en cuatro meses con trabajo en doble turno", explicó el profesor.
La FAPESP precisó que para desarrollar la molécula utilizada en la prueba, los investigadores de Biolinker produjeron en el laboratorio la punta de la proteína viral conocida como RBD (siglas en inglés de receptor "binding domain").
Mona Oliveira, jefa científica y fundadora de la "startup", dijo que fue utilizada una tecnología conocida como "ADN recombinante", que consiste en usar bacterias modificadas genéticamente para expresar la proteína viral in vitro.