El paciente dio positivo para la enfermedad desde septiembre de 2020 hasta abril de este año.
La investigación, publicada en la plataforma medRxiv y que aún debe ser revisada por otros expertos, fue conducida por científicos de la Universidad de Sao Paulo (USP), que descubrieron que el virus no solo estuvo presente en el organismo del paciente, sino que también se replicó en buena parte de ese tiempo.
"Durante todo ese periodo hubo riesgo de transmisión para otras personas", explicó María Mendes-Correa, profesora de la Facultad de Medicina de la USP y primera autora de la investigación.
Ello fue corroborado en exámenes in vitro a partir de muestras nasofaríngeas y de saliva extraídas semanalmente, y en las cuales, pasadas unas horas, era posible apreciar un aumento de la carga viral.
"Esa capacidad replicante del virus fue observada de forma continua y persistente durante un periodo de 196 días consecutivos", indicó Mendes-Correa.
Además, los científicos también detectaron mutaciones del patógeno a lo largo del proceso de infección, a partir de la secuenciación genética de muestras nasofaríngeas recogidas los días 77, 134, 169 y 196 tras el inicio de los primeros síntomas.
El paciente en cuestión permaneció buena parte del tiempo ingresado en el hospital y en los cortos periodos de tiempo en los que estuvo en casa, también permaneció aislado.
Con 505 mil muertes y más de 18 millones de positivos, Brasil es el país de Latinoamérica más castigado por la pandemia del coronavirus, el segundo del mundo con más decesos vinculados a la enfermedad y el tercero con más contagios, por detrás de Estados Unidos y la India.