Brasil habría evitado la muerte de unos 47.000 ancianos, así como la hospitalización de otros 104.000, en caso de que hubiese anticipado o intensificado su campaña de vacunación contra la covid, según un estudio publicado este lunes.
El gigante latinoamericano, uno de los dos países más castigados por la pandemia en el mundo, con cerca de 689.000 muertes y más de 35 millones de contagios, tan solo inició su campaña de inmunización contra el coronavirus el 17 de enero de 2021, casi un mes después de la aplicación de la primera vacuna en el mundo.
El estudio de diversos científicos brasileños encabezados por la estatal Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz) concluyó que la muerte de ancianos provocada por covid podía haber sido entre un 40 % y un 50 % inferior a la registrada entre enero y agosto de 2021 si la campaña de inmunización hubiese comenzado antes o a un ritmo más rápido.
Un análisis de los datos de los primeros ocho meses de vacunación permitió concluir que la inmunización salvó entre 54.000 y 63.000 vidas de personas con más de 60 años y evitó la hospitalización de entre 158.000 y 178.000 ancianos.
Pero las vidas de ancianos salvadas podrían haber llegado hasta 110.000, concluyó el estudio, cuyos resultados fueron destacados en un artículo publicado hoy en la última edición de la revista científica "The Lancet Regional Health Americas".
De acuerdo con los investigadores, pese a que Brasil inició la campaña poco después de otros países, contaba con pocas vacunas al comienzo de la campaña y eso impidió que la inmunización fuese más rápida.